¡Hola! Quiero empezar con un poco de historia para que puedan entender el cuadro que viene a continuación.

Así como entran a una tienda Soft y es un sueño, todas nos imaginamos que el nacimiento de nuestro bebe será así, mágico y el momento más increíble de nuestras vidas pero a veces la vida nos da una cachetada en la cara cuando menos nos lo esperamos... como me paso a mi. Sola, esperando en mi habitación del hospital, con mi esposo a una hora de viaje, en un país que no es el mío, y sin nadie de mi familia cerca, me dijeron: ¡Nos tenemos que ir YA a la sala de operaciones, está es una operación de emergencia! y sin entender lo que pasaba, me dije: A esa operación tengo que entrar con LA MEJOR ACTITUD y con las mismas pedí música de fondo y, me llevaron en la camilla al quirófano con la canción de ROCKY ( y tengo el vídeo para probarlo) para mi cesaría de emergencia en la semana 32.

Así nació EMI a las 5:55 pm, con su mamá con los ovarios bien puestos, con la canción de Rocky todavía sonando en mi mente, mientras le buscaba conversación sobre el clima al chico que te carga como un saco de papas luego de puesta la epidural, mientras por supuesto, él podría verme con todas las tripas afuera. Surreal para él y para mí un clásico ejemplo de cómo nunca cierro la boca.

A la semana 32, todavía Emi no tenía muy desarrollado el reflejo de succión y era enanita con solo 1.750 kilos (lejos de los 8 kilos de puro amor de hoy en día). Estuvo en incubadora y luego más de un mes en la UCI básicamente para que “aprendiera” a succionar. Al inicio tuve mucha pero mucha leche, algo raro por las semanas de gestación, pero es muy común con el distanciamiento y no tener a tu bebé pegado todo el día que se vaya cortando y si sumas el estrés y desgaste emocional de tener a tu bebé en una unidad de cuidados intensivos y no olvidar claro... el post parto y la locura de hormonas... se iba reduciendo mi leche día tras día.

Todas las neonatólogas me insistían en que, sobretodo todo para los prematuros, la leche materna es simplemente el elixir de la vida y yo me presione muchísimo con la lactancia. Mi cuadro les dará un idea del punto al que llegue a disciplinarme con ello. A lo mejor debí ser menos dura conmigo misma pero responsabilizo a la culpabilidad que llega con la maternidad.

En fin.....fui un día al hospital y la especialista en lactancia, me dijo: ¡Todo lo demás son cuentos, mientras más te saques más saldrá, así que si estás comprometida...métele a la extracción poderosa! y así fue... de 310 ml a casi 1 litro 3 semanas después. Con el paso de la primera semana, vi el primer subidón y fue muy gratificante, así que eso también te anima a continuar. Pasado el día 18, decidí internarlo para tener el siguiente “boost" de leche y así subí hasta casi 1 litro de leche.

¡Ojalá les sirva! Decidí publicarlo porque yo busqué información por TODAS partes y fue prácticamente imposible encontrar algo similar. También les envío el descargable por si se animan a hacerlo y pueden utilizar esta misma plantilla.

La lactancia es SUMAMENTE personal, no conocemos la realidad de las demás mamás y por eso cada una debe descubrir su propio camino en esta nueva experiencia que nos toca como mujeres, y creo que lo que elijas, sea 100% pecho, 100% diferida, mitad y mitad, mixta, o si decides dar fórmula, si tu te sientes tranquila con eso, es lo correcto. No te sientas juzgada, corta, o atropellada por las opiniones de los demás, la maternidad es algo para toda la vida y ya tendremos muchas otras veces para dudar de nosotras mismas. Que tú lactancia no sea una de ellas.

Con cariño para todas las mamis,

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